jueves, 27 de diciembre de 2007

Sobre el asesinato de Benazir Bhutto



Con este atentado, al-Qaeda proclama “haber acabado con el más preciado activo norteamericano que estaba dispuesto para acabar con los muyahidines.” Y es cierto que el proceso de democratización interna en Pakistán ha sufrido un golpe importante. Sin embargo, hay que tener en cuenta que, como apunta Debbie Schlussel:

La “moderada” Bhutto estaba apoyada por Arabia Saudí, era profundamente antisemita, apoyaba el terrorismo palestino y era una fuerza de inestabilidad y anarquía en su país. O sea, que tampoco era una santa. Su regreso a la política sólo ha servido para dividir a las fuerzas pronorteamericanas, permitiendo reconquistar terreno a los cada vez más populares islamistas.
La idea de George W. Bush de traer a Bhutto de su exilio en el Golfo fue un mal movimiento, que recuerda al que hizo Jimmy Carter en Irán hace tres décadas: dejar de apoyar al Shah, prooccidental, y, de entre el caos, favorecer indirectamente la toma del poder por parte de los islamistas.

Lo que está claro es que la prioridad de al-Qaeda no es ya Iraq, donde da por perdida la batalla, sino el mucho más goloso y nuclearizado Pakistán. En este país han muerto más de 400 civiles en los últimos meses a causa de atentados indiscriminados. Pero como los medios no tienen una ocupación americana a la que responsabilizar de esos atentados, prefieren ignorar la gravedad del problema y a su verdadero responsable: el islamismo, enemigo de la democracia y de la libertad. Tanto en Iraq como en Pakistán.

ACTUALIZACIÓN: Los últimos instantes de Benazir Bhutto

6 comentarios:

Ignacio dijo...

Es algo complejo pero yoya no se que pensr laverdad veo coss que no se si soy un paranoico o que.

Anónimo dijo...

Me ha sorprendido la noticia. Pero si hay algo que se ha demostrado es que la entrada de Bhutto en Pakistán ha contribuído a la desestabilización del país. Feliz Navidad.

El Cerrajero dijo...

Así es y haces bien en poner el dedo en la auténtica llaga: no quiero ni imaginarme una República Islámica con arsenal nuclear.

Patito_feo dijo...

Gracias por tus palabras. La verdad es que es bueno encontrar blogs con noticias de actualidad, porque una de las cosas que más me ha llamado la atención de éste asesinato es la falta de información de los medios de comunicación.

Hay dos factores que han podido contribuir a que sienta cierta simpatía por esta mujer. Primero que ha defendido sus ideas hasta el final. Que la han matado islamistas, luego no les gustaba. Y por último que es una mujer. Bastante importante por aquella zona.

Schwan dijo...

Pues claro que no era una santa, Persio; estamos completamente de acuerdo.

Pero, a ver, se trata de el mal menor. De hecho, Shimon Peres, el presidente de Israel estuvo hace pocos días reunido con ella y los esposo de ambos planificando una posible campaña. Y, a su muerte, las declaraciones de Peres no dejan lugar a dudas.

Es decir, que de todo lo disponible para elegir como presidente de Paquistán era quiz´alo menos malo. Y no se producíría una ruptura de los partidos más prooccidentales puesto que de todos es sabido que la última intención de Musharraf y Bhutto era una coalición entre ambos.

de hecho, por esta coalición con Musharraf fue muy criticada entre las propias filas del PPP.

Persio dijo...

ignacio: ya, que si Musharraf no la protegió lo suficiente. Es posible. Aunque, como comenta Schwan, había llegado a un acuerdo con Bhutto para compartir el poder. Y su asesinato no le beneficia. Al menos de momento: los manifestantes expresan su rabia contra él, más que contra los presumibles asesinos islamistas.

el_bibliófilo: Totalmente de acuerdo. Esta mujer divide más que afirma Pakistán.

el cerrajero: Efectivamente. Ese es el asunto. Que los islamistas van decididamente a por las "nukes". Es su objetivo número 1.
La tesis de Zawahiri "on the rise"

patito feo: Desde luego es un hito que una mujer llegara tan alto. La Indira Ghandi de Pakistán.

schwan: Es posible que sea la menos impresentable de los tres líderes políticos del país. Pero no hay que olvidar su contribución al movimiento talibán (que ahora se le ha vuelto en contra) ni su capacidad para dividir al país.
Sobre el papel, la más democrática, etc. En la realidad, Musharraf parece más capaz de luchar contra el islamismo.

Un saludo