J.L. Restán, Libertad Digital - El pasado 6 de mayo, el Patriarca de los Caldeos Emmanuel III Delly, lanzó desde la iglesia de Mar Qardagh, en Irbil, una dramática petición de auxilio al Gobierno de Bagdad y a la comunidad internacional para que frenen la terrible sangría que sufre la población cristiana de Iraq. El Patriarca habló desde una ciudad del Kurdistán. No en vano esa región se ha convertido en una especie de "zona segura" para los cristianos. "Los cristianos son asesinados y sacados de sus casas, ante la mirada de quienes son responsables de su seguridad".
En el caso de las poblaciones cristianas se trata de una verdadera "caza del hombre". A los atentados contra las iglesias se suman los secuestros de sacerdotes (seis se encuentran actualmente en esa situación) y las extorsiones de todo tipo a las familias, a las que se exige entregar al menos una hija, para que sea desposada por un musulmán. También se prohíben (siempre con la amenaza latente de la violencia) la visibilidad de los signos cristianos. En el barrio de Dora, en Bagdad, donde los cristianos eran tradicionalmente mayoría, los grupos islamistas han impuesto de facto la jiza, un tributo que históricamente imponían los musulmanes a las minorías cristiana y hebrea como signo de sumisión. La tasa fijada se sitúa entre 150 y 200 dólares al año, cantidad que necesita mensualmente una familia para sobrevivir. Pero esta asfixiante situación no afecta sólo a la capital, de la que según fuentes de Asia News ya han salido la mitad de los cristianos que vivían allí antes del estallido de la violencia, sino también a la ciudad sureña de Basora y a Mosul. Fruto de la irrefrenable violencia, del millón y medio de cristianos que vivían el año 2000 en Irak apenas medio millón permanece en el país. Leer más...
5 comentarios:
Estuve en Iraq en 2001, cuando todavía gobernaba Saddam. Lo primero que me llamó la atención en Baghdad fue ver tantas iglesias como mezquitas. Luego pude hablar con cristianos iraquíes que me dijeron que no había ningún problema con la religión en Iraq, todas estaban permitidas y ninguna perseguida. Ahora es todo lo contrario, los cristianos son perseguidos por sunníes y shi'íes, y éstos se matan entre ellos.
Ya, puede que la libertad religiosa fuera de las pocas libertades que había en Iraq por aquel entonces. (Salvo para los chiíes.) Ahora, en cambio, como bien dices, leña a los cristianos y leña entre las dos ramas del Islam.
Sin un aparator represor como el sadamita el terrorismo es más difícil de combatir, qué duda cabe.
Sin duda, Persio, y no es mi intención defender a Saddam, pero el caso es que no hay muchas minorías cristianas en el mundo árabe y las pocas que hay están desapareciendo. El régimen de Saddam era brutal, pero a cada uno lo suyo, había libertad religiosa. Ahora los cristianos desaparecerán de Iraq mientras shiíes y sunníes se matan entre ellos. No hago más que exponer un hecho.
Y bien expuesto queda :)
Un abrazo
... Estaba dando vueltas por ahí, pensando en el tema...
Un poco de historia familiar sadamita:
Se dice que la madre de Sadam, desesperada por un marido ausente, pensó en abortar al pequeño diablillo -todavía inocente- que llevaba en su seno. Y una mujer judía fue quien la disuadió de la idea.
Y luego el diablillo, ya crecidito, así se comportó con los judíos... A algunos de los cuales llegó a ahorcar en la plaza pública. Con los judíos tampoco tuvo contemplaciones. Muchos dejaron de llorar en los ríos de Babilonia.
Publicar un comentario